¿Te gustaría convertirte en un arrecife al final de tu vida?
El paradigma de la muerte tiene muchas ópticas. Existen aquellos que viven la muerte desde la tradición y esperan pasar sus últimos días en un lugar concebido para dicho fin, por ejemplo, un panteón, cerca de sus seres queridos donde sus restos podrán ser fácilmente visitados.
Otros, sin embargo, visualizan su encuentro con la muerte como una experiencia más cercana a la naturaleza. Como un regresar al ciclo de la vida.
Es por eso por lo que algunas empresas han desarrollado alternativas para quienes esperan regresar a la naturaleza una vez que hayan fallecido, puedan cumplir su visión.
¿Cuál es una de estas alternativas?
Una empresa mexicana, ofrece los servicios de depositar las cenizas de un ser querido en una urna en el fondo del mar, donde unida a una estructura de concreto hidráulico de 200 kilogramos se convierte en el lugar ideal para que florezca la vida marina, favoreciendo el crecimiento de arrecifes y toda la fauna marina que convive con ellos, incluyendo peces de gran colorido. Filosóficamente es una forma de ligar la vida y la muerte a través de un ciclo. Todo esto acompañado de un respetuoso ritual de despedida donde pueden participar los familiares del difunto.
¿Este proceso tiene alguna repercusión ambiental?
Es importante mencionar que este proceso se lleva a cabo atendiendo a todas las regulaciones ambientales para minimizar el impacto al medio ambiente y por su puesto con los permisos correspondientes otorgados por los gobiernos estatales y federales.
Esta empresa también ofrece otro tipo de servicios similares como dispersar las cenizas en el mar o la colocación de cenizas en urnas biodegradables.
Así cada vez tenemos más alternativas para despedir a nuestros seres amados, de formas que vayan más con la forma de pensar de nuestros difuntos y/ o de aquellos que van a despedirlos.