La pérdida de un hijo
La pérdida de un hijo es uno de los duelos más difíciles. Este tipo de pérdida se considera anti natural ya que los padres no esperan que sus hijos partan antes que ellos. Como todo duelo es fundamental vivir sus etapas y buscar ayuda.
¿Cómo vivir el duelo por la pérdida de un hijo?
Aceptar que las cosas no pudieron ser diferentes.
Quizá estés experimentando uno de los dolores más fuertes que hayas vivido y no debes de forzarte a ser fuerte. Acepta tu dolor y trabaja todos los días en tratar de dejarlo ir. No busques explicaciones para situaciones en las que probablemente no obtendrás respuestas.
Buscar apoyo.
En este tipo de duelo y en muchos es otros, es muy importante buscar apoyo de un psicólogo o tanatólogo para que te pueda brindar ayuda profesional y comenzar a entender tu dolor y aceptar tu pérdida.
No aislarse.
Quizá sientes que nadie entiende tu dolor y está bien, pero no olvides que tus seres queridos te quieren apoyar y pueden estar ahí para escucharte y abrazarte siempre que lo necesites.
Retomar la rutina poco a poco.
Retomar la rutina es de gran ayuda para comenzar a entender que la vida sigue, cuida tu salud y esfuérzate por retomar tus actividades diarias. No quiere decir que hayas superado totalmente lo sucedido y que ya no sientas dolor, simplemente es un pequeño esfuerzo para poder salir adelante.
Pensar en lo que le hubiera gustado a él/ella.
Tú hijo no eligió partir y esta situación no es fácil para nadie, sin embargo, si él pudiera decirte algo, sin duda sería que está bien, que está en paz y que le encantaría volverte a ver sonreír.
Es cierto que lo extrañarás todos los días, la diferencia está en aprender a valorar todo el tiempo compartido y atesorar todos los bellos recuerdos que te acompañarán por siempre.