La Batalla de Puebla
La Guerra de Reforma tuvo un serio impacto en el estado mexicano.
Uno fue la crisis económica que llevó al presidente Juárez a dejar de pagar las deudas que había firmado con otros países.
En su interés, Francia, Gran Bretaña y España enviaron tropas a la costa de México. Sin embargo, como resultado de las negociaciones diplomáticas y la firma del Tratado de La Soledad, el gobierno mexicano se ha comprometido a realizar los pagos correspondientes. Como resultado, Gran Bretaña y España abandonaron la tierra, pero el gobierno francés no cumplió con las disposiciones del tratado anterior y comenzó la intervención armada en México.
El avance del ejército francés al mando del general Charles Ferdinand Latrill, propició la movilización de las tropas mexicanas. El general Ignacio Zaragoza, comandante en jefe del Ejército de Oriente, decidió concentrar sus tropas en la ciudad de Puebla y ponerlas en estado defensivo para enfrentar allí a las tropas invasoras.
A las 9 de la mañana del 5 de mayo de 1862, el disparo de un cañón mexicano fue uno de los días más ilustres de nuestra historia. El cuartel general francés se centró en el Fuerte de Guadalupe, momento en el que lanzó su primer ataque. A pesar de la superioridad de las armas de Lawrence, fueron detenidos por las Fuerzas Armadas. El ataque francés se repitió dos veces más, pero los soldados mexicanos lo repelieron en ambas ocasiones, lo que provocó la retirada de Francia.
El coraje y patriotismo de los soldados al mando del General Zaragoza hicieron de este acto armado un símbolo de nuestra soberanía e independencia. En ese glorioso día, el ejército del más alto gobierno se vio envuelto en gloria cuando el mejor ejército del mundo fue derrotado por los hijos mayores de México.