Día del maestro
El Día del Maestro, que se celebra el 15 de mayo en México, es un día designado para honrar a todos los maestros y educadores en México.
Una de las características de una corporación educativa es que existe en todas partes.
Desde el surgimiento de México como país ha existido la necesidad e importancia del trabajo como maestro. Ha aumentado la urgencia de contar con un especialista en educación dedicado a la educación básica y se han impulsado diversos enfoques.
En las comunidades, especialmente en las zonas rurales, los docentes son los protagonistas. Los docentes muchas veces pertenecen o están integrados en la misma comunidad, por lo que el aprendizaje y la enseñanza en la comunidad se basan en necesidades y conocimientos.
Con el desarrollo de las áreas urbanas y el crecimiento de las grandes ciudades, las relaciones profesor-alumno son cada vez más distantes, pero en muchos lugares todavía existen las relaciones establecidas entre docentes y alumnos ya que continúan contribuyendo a la cohesión y formación comunitaria.
Otra característica importante y notable de los docentes es que luchan por mejorar las condiciones laborales y las recompensas, y que logran autonomía y democracia en sus sindicatos.
Ante la contingencia debido al COVID-19, comenzamos a ver las deficiencias y la falta de herramientas y tecnología que tenemos en México. Todas las escuelas cerraron por alrededor de 2 años y sufrimos una de las crisis más grandes de todas.
Los niños y adolescentes no cuentan con el espacio para estudiar en casa, deben compartir con toda la familia las herramientas y los espacios. Muchos no tienen acceso a una computadora conectada a internet para realizar sus tareas escolares.
Esta crisis mundial, ha sido un empuje para el aprendizaje. Aprendimos sobre la adaptabilidad y lo resistentes que pueden ser los sistemas educativos, los profesores, los alumnos y las familias.
La educación es un derecho humano fundamental, fundamental para la misión de la UNESCO, y está estrechamente vinculada a la Declaración Universal de los Derechos Humanos (1948) y muchos otros documentos internacionales de derechos humanos.
“La educación tendrá por objeto el pleno desarrollo de la personalidad humana y el fortalecimiento del respeto a los derechos humanos y a las libertades fundamentales; favorecerá la comprensión, la tolerancia y la amistad entre todas las naciones y todos los grupos étnicos y religiosos; y promoverá el desarrollo de las actividades de las Naciones Unidas para el mantenimiento de la paz.”
Declaración Universal de los Derechos Humanos, artículo 26