Dar sentido a tu vida
En su maravilloso libro el escritor Earl Nightingale El Secreto Más Extraño del Mundo menciona que se hizo una encuesta entre gente de trabajo tomando como base esta pregunta ¿por qué se levanta usted en la mañana para ir a trabajar? 19 de cada 20 no tenían idea de cómo contestar. Se les ocurrió decir “bueno, porque todo mundo lo hace ¿o no?” y en realidad eran sinceros.
¿Hace cuánto que no te detienes a pensar cuál es el sentido de tu vida?
Y es que, si no somos cuidadosos, podemos permitir que la vida nos lleve a donde nos arrastre, como hojas en un rio que no tienen control de su destino.
El día a día puede ser abrumador. Trabajo, niños a la escuela, tareas, compromisos sociales, pagar impuestos, composturas en la casa, hacer el quehacer, mandados ¿a qué horas voy a sentarme a reflexionar el sentido de mi vida? Entonces nos convertimos en esclavos de nuestra circunstancia.
Por eso es importante de vez en cuando obligarnos a hacer un alto y reflexionar si lo que estamos haciendo de nuestra vida es lo que nos hace felices, lo que nos planteamos como objetivo o lo que nos hace sentirnos plenos.
¿Qué consejos nos dan personalidades como Steve Jobs y Winston Churchill?
Steve Jobs menciona en su famoso discurso a los graduados de la Universidad de Stanford, que tenía el hábito de mirarse todos los días al espejo. Y que, si no le gustaba lo que veía, es decir, no le gustaba el rumbo que tenía su vida en ese momento, tomaba una actitud activa para reivindicar el camino de su vida.
Winston Churchill el primer ministro británico durante la Segunda Guerra Mundial y uno de los políticos más admirados de la historia, tenía tiempo para leer todos los días, aun en los días en los que lideraba la defensa de su país en la guerra más grande que ha tenido la humanidad.
Así también los demás debemos de obligarnos a tener el tiempo para buscar darle un sentido a nuestra vida y hacer los ajustes necesarios en caso de que nuestra haya tomado un rumbo que no es el que buscamos.