Ahora es posible enviar las cenizas de un ser querido al espacio exterior
Un día, el famoso astrónomo y divulgador científico Carl Sagan dijo que, “si queríamos hacer un pie de manzana desde el principio, primero debíamos inventar el universo”. Aquella afirmación es el comienzo de uno de los famosos capítulos de la serie Cosmos que se transmitió en TV en los años 90. En aquel capítulo, el reputado científico reflexiona como toda, absolutamente toda la materia existente en la tierra ya sea el agua de los mares, el metal que usamos para fabricar autos, o efectivamente, las manzanas necesarias para hacer un pie fueron en algún momento parte de una estrella que a la postre explotó y conformó planetas -como la Tierra- y todo lo que en ella existe.
¿Qué concluye Carl Sagan sobre el futuro de la tierra?
Así también, concluye que al final cuando el sol muera en 5 mil millones de años, todo lo que está en la tierra, volverá a ser materia estelar. El cosmos, siempre ha intrigado al ser humano. Desde las épocas de los egipcios, los griegos, los mayas y prácticamente todas las civilizaciones importantes, voltearon a ver el cielo. Construyeron historias, constelaciones, deidades, calendarios, leyendas y mitos alrededor de las estrellas. En los tiempos modernos la fascinación por el cielo continúa. Y es el sueño de muchos hacer un viaje al espacio exterior. Un sueño que ahora es posible realizar. Si no en vida, al menos en cenizas.
¿En qué consiste la opción de enviar cenizas al espacio exterior?
La empresa Celestis ofrece enviar los restos cremados de un ser humano al espacio exterior. La experiencia que ofrece Celestis es enviar en un solo cohete, los restos humanos hechos cenizas de varios difuntos, reuniendo familias de todo el mundo, que puedan intercambiar experiencias de sus seres queridos que recién fallecieron. El evento tiene una duración de 3 días y ofrecen un momento de reflexión, sanación y celebración.
Estos vuelos al espacio con cenizas están regulados por la FAA (Administración Federal de Aviación en los Estados Unidos). Las cápsulas de Celestis y la trayectoria definida están diseñados para enviar las cenizas a lo profundo del espacio, evitando orbitar alrededor de la Tierra o producir efectos adversos o riesgos para vuelos tripulados al espacio exterior.
Así de alguna forma, las personas que deciden usar este servicio vuelven a su origen, es decir al cosmos, como reflexionaba Carl Sagan.